Ayer, la iglesia de Santa María del Mar, la más grande de Barcelona y aún así desbordaba el número de personas, en donde se celebró el funeral de cuerpo presente, era un inmenso homenaje de agradecimiento que culminó con el mayor aplauso que yo creo haber oído en mi vida.
Como dice el texto que os adjunto y que han publicado hoy en la Vanguardia hizo de su vida el lema “En todo servir y estimar”. Su último mensaje a la directora del colegio fue “Amar mucho a Jesús”. Y así pedimos en nombre de nuestra asociación, extensible a todas las asociaciones de antiguos alumnos de la Compañía, que nos ayude a tener las puertas siempre abiertas a todos los exalumnos de nuestras escuelas para que puedan ser acogidos tal como habría hecho nuestro consiliario, el P. Raimon Algueró.
Un abrazo
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Maria del Carmen Llasat Botija
Associació Antics Alumnes Casp